IMPULSANDO EL PENSAMIENTO POSITIVO

Junto con la gratitud, la confianza en uno mismo es la otra base necesaria para el optimismo. Según el psicólogo Nathaniel Branden, "De todos los juicios que emitimos en la vida, ninguno es más importante que el que emitimos sobre nosotros mismos". La confianza en uno mismo es una evaluación de nuestra valía básica. Es una predisposición a vernos capaces de hacer frente a los numerosos retos de la vida. Es la creencia de que podemos y debemos ser felices.



Si tenemos confianza en nosotros mismos, avanzamos hacia nuestros objetivos; sin ella, nos refugiamos en la negación, las excusas y el miedo. Cuando no tenemos confianza en nosotros mismos, nuestros pensamientos y acciones rara vez se basan en la realidad. Cuando tenemos confianza en nosotros mismos, actuamos de forma que nos beneficia, lo que a su vez aumenta nuestra autoestima y optimismo.



Podemos elegir cómo pensar en nosotros mismos. Como adulto, puedes librar a tu cerebro de la negatividad que te ha estado frenando. Tienes la capacidad de sentirte mejor contigo mismo y con tu futuro. Todo depende de las decisiones que tomes.