Palo Negro Crónicas de la más sangrienta y más absurda batalla de la guerra de los mil días

El día 11 de mayo del año 1900, se rompieron los fuegos del lado de los cafetales en la región llamada Palonegro, a escasas dos leguas y media de la ciudad capital del Gran Santander, Bucaramanga.
Esta batalla resultaría la más cruenta de todas las vividas en el país, enmarcada dentro de la lucha por el poder entre Revolucionarios (liberales) y Gobiernistas (conservadores), durante los años 1899 y 1902, que duraría exactamente 1128 días y se llamaría luego la Guerra de los Mil Días.
Fueron 15 días transcurridos hasta el 26 de mayo del mismo año, pero una eternidad de sangre y carnicería humana, por una lucha fratricida que se extiende incluso hasta nuestros días. Los contendores: un batallón oficialista que alcanzaba los 15.000 efectivos fuertemente armados, y otro revolucionario de 12.000 hombres dispuestos a dar la vida por la libertad, pero sin muchos pertrechos para ello.
Sobre los sucesos de la batalla, que sean los escritos históricos y las obras de arte las que le hablen en adelante al lector; así que me limitaré simplemente a decir, que es un orgullo para la Fundación El Libro Total haber hecho esta convocatoria en pro de una causa tan justa como lo es la reconstrucción y redimensionamiento de nuestra historia santandereana.
Más de treinta personas son los autores -sin contar los colaboradores y demás- de esta bella obra que nos dignifica e identifica como pueblo, y que han decidido liberalmente trabajar en pro de una identidad que del sueño pasa hoy a un despertar sorpresivo… Quizás en un futuro, del letargo soñoliento y de la sorpresa pasemos a la acción que nos lleve a tomar el puesto que nos ha forjado la historia misma… con cargas y asaltos a machete y una carnicería espantosa como dijera algún testigo presencial de la Batalla de Palonegro.
Fueron miles los que lucharon, miles los que murieron, miles los tiros disparados y heridas infligidas, miles los días de lucha… pero también hoy ya son miles los que están despertando para forjar un mejor mañana.