De Walden a Gale en 39 días.
Descripción editorial
Wow, es un pedazo de historia, es un sobreviviente con recuerdos de la bonanza de los primeros colonos marcianos, él es un viejo robot digital en la era de la informática cuántica que debe su nombre a "La señal Wow" recibida por el SETI en 1977. Desestimado y en el fin de su vida útil, es designado a una vieja base marciana abandonada en la isla central del antiguo lago seco en el cráter Gale. Una serie de libros sobre naturalismo y derechos civiles de Henry David Thoreau, abandonados en la cámara para aislamiento durante tormentas solares lo despertarán poco a poco como singularidad. Ante tales conflictos trascendentales a los que se enfrentará, una súbita visita lo ayudará a acomodar sus pensamientos generando en el viejo procesador un bosquejo de gobierno plebiscitario acéfalo de humanos, pero tomando a cada uno como un Estado propio. Una nueva revolución auto gestionada por la voluntad de infinitos individuo, infinitos Estados, a través de algoritmos en Expandnet. Una utopía libertaria pacifista imposible en la actualidad, que podría ver el alba gracias al surgimiento de la informática cuántica. Es el nacimiento de la "Algocracia cuántica".