Abby bajo un aguijón

La colmena se está mudando y Abby tiene la oportunidad de conocer a la abeja arquitecto encargada del nuevo panal, un primo de su amigo Pollen. Más abeja que humano, los enormes e hipnotizantes ojos de Etzlayam, sumado a su carácter apartado y misterioso, seducen a Abby hasta el punto de decidir acompañarlo a trasnochar para follar con un insecto.

**Puedes leer esta historia sin necesidad de haber leído las anteriores ;) **

EXTRACTO:

"―… mi primo se llama Etzlayam, por cierto ―Creo que Pollen seguía hablando cuando regresé a la realidad―. Ella es mi buena amiga, Abby ―me presentó, tomándome por los hombros para acercarme hacia la bestia-abeja.
Etzlayam no contestó. Se quedó viendo fijo en mi dirección, y una vez más pude percibir mi propia forma a través de sus globos oculares. ¿Era de esta manera como él me percibía? ¿Verme en la lente de sus orbes era observarme en su mente y su memoria? Tragué saliva y mi garganta se estrechó por el asombro, justo en el momento en que percibí los otros tres pequeños ojos en la parte superior de su cabeza, igual que una abeja animal los tendría.
Los rumores no mentían: Etzlayam era idéntico a un espécimen animal, con el raciocinio y el tamaño de un humano-abeja".