Mi gran y escandaloso divorcio ruso

Este soy yo en todo mi glorioso y patético esplendor. Soy el resultado de una suerte traicionera. Esta vida es algo que nunca pude haber imaginado. Una decisión que yo jamás habría tomado, un tiro suicida que jamás me habría dado. ¿Quién aceptaría convertirse en un zombi descerebrado que suplica por un cerebro? Nadie en su sano juicio haría algo tan desagradable.

         ¡Ovejas aburridas! Todos ellos, eso digo yo.

         Desafortunadamente para mí no soy cualquiera. Más bien no soy un conformista, tampoco un hombre cualquiera. Cuando de la vida se trata, me gusta difícil y sexy, como un verdadero infierno incluso si es desventajoso para mí. Mi madre no crio a ningún perdedor; si el fracaso es mi destino, entonces deberé errar majestuosamente de una manera tan épica que no habrá forma de que alguien llegue jamás a olvidar mi trágico final. Ni siquiera yo…

Sea este mi justo destino y glorioso descenso a los pozos ardientes de endemoniado infierno. Esta extremadamente precaria decisión tiene un nombre, su nombre es Julia. Ella es el motivo de todos mis predicamentos y errores. No, me estoy quedando corto.

¡Todo sucedió por ella!

¡La Diabla!

Pero ¿Qué pasaría si esto pudiera ser diferente? ¿Podría todo esto ser de otra manera? El “si hubiera” y “si no hubiera”, el inexplicable enigma de mi dulce vida. Esta es la implacable pregunta que no me puedo responder.

Aún…