Las novias del vampiro

Precuela de la novela corta Yo tenía diez marinos. Es 1896 y el Conde se encuentra levitando de paseo en la necrópolis de Vladtpesville, la villa en las cercanías de su castillo. Encuentra a un inglés de apellido Cushing y, previa cena, mantiene un diálogo con él, enterándose que el extranjero está en busca de la mansión de los Dumitrescu, pues ahí vive su novia Andrea, la que resulta ser hermana de una de las novias del Conde. Con tal cercanía, el aristócrata alecciona al joven respecto a lo que podría venir en su relación, ejemplificando con su propio caso en una relación de a cuatro, aunque previamente el británico le relata su paso por el pueblo; en la taberna del pueblo, La garganta sangrante, los parroquianos le han advertido sobre el peligro de salir a buscar en plena oscuridad la casa de los Dumitrescu y sobre la existencia de La bestia. Posteriormente, el Conde deberá enfrentar a una turba de pueblerinos que deciden ir a su castillo a confrontarlo, pues la supervivencia de Vladtepesville y de sus habitantes se halla en peligro.